Aunque la Edad Media es un período muy largo, de casi mil años, no son tantos los compositores conocidos de esta época. Esto se debe a que durante cientos de años la música no se escribía, sino que se transmitía oralmente, y a que tampoco se le daba importancia a la figura del compositor. No será hasta el siglo XII cuando empecemos a tener noticia de autores de renombre.
A finales del siglo XII y comienzos del XIII se organizó en París una escuela de compositores de música religiosa: la Escuela de Notre-Dame. Los dos primeros directores de dicha escuela son los maestros conocidos como Leonin (1150-1201) y Perotin (1160-1230). De ellos poco sabemos, excepto que hicieron grandes aportaciones al desarrollo de la polifonía, especialmente del organum y el conductus, y que el segundo trabajó revisando y ampliando las obras que había hecho el primero.
Un monje inglés del que desconocemos el nombre habló de ellos casi un siglo después en un famoso texto llamado "Anonymus IV" y los reconoce como grandísimos compositores. En la hermosa catedral gótica de Notre-Dame de París se conserva un manuscrito con algunas de sus obras litúrgicas más importantes. Se conoce como Magnus Liber.
Si seguimos en Francia, el principal compositor del siglo XIV fue el obispo Guillaume de Machaut (1300-1377).
A pesar de ser un clérigo escribió mucha música de carácter profano (Virelais, Baladas, etc.) aunque su obra más conocida es una misa para 4 voces: la Messe de Nostre-Dame. Se cree que la compuso para la coronación de Carlos V de Francia y que sonó por primera vez en la catedral gótica de Reims. Es tan conocida, porque además de ser muy hermosa era la primera vez que un compositor hacía él solo todas las partes de una Misa. El artista empieza a ser consciente de su valor: sin duda nos acercamos al Renacimiento.
No podemos olvidarnos de nuestro país porque aquí llegaron muchas novedades musicales. En el monasterio catalán de Montserrat se conserva el principal manuscrito con piezas del Ars Nova: el Llibre Vermell (llamado así por el color bermellón rojo de su forro de terciopelo).
A pesar de que ha perdido muchas de las obras que tenía originalmente, conserva 10 cánticos y danzas que realizaban los peregrinos que allí acudían.
En Italia el principal compositor medieval fue Francesco Landini. Músico y compositor ciego, supo utilizar de manera magistral las principales novedades de medida que caracterizaron el Ars Nova francés, pero añadió un sentido melódico que aquél no tenía con tanta claridad. También mostró la capacidad y belleza de la lengua italiana como idioma de la música. Compuso hermosas balladas, caccias y madrigales. Este último fue el primer género polifónico en italiano. Precísamente su nombre significa "en lengua materna". Solía presentar dos voces y trataba temas amorosos o pastoriles.
Nos ha dejado algunas de sus composiciones en un precioso manuscrito del s.XIV conocido como Codex Squarcialupi. En él, y como novedad, no sólo se conservan partituras sino unos pequeños retratos de algunos de sus autores como el que estáis viendo. Los artistas ya no son anónimos como en los siglos anteriores…algo nuevo se anuncia: ¿qué?
A finales del siglo XII y comienzos del XIII se organizó en París una escuela de compositores de música religiosa: la Escuela de Notre-Dame. Los dos primeros directores de dicha escuela son los maestros conocidos como Leonin (1150-1201) y Perotin (1160-1230). De ellos poco sabemos, excepto que hicieron grandes aportaciones al desarrollo de la polifonía, especialmente del organum y el conductus, y que el segundo trabajó revisando y ampliando las obras que había hecho el primero.
Un monje inglés del que desconocemos el nombre habló de ellos casi un siglo después en un famoso texto llamado "Anonymus IV" y los reconoce como grandísimos compositores. En la hermosa catedral gótica de Notre-Dame de París se conserva un manuscrito con algunas de sus obras litúrgicas más importantes. Se conoce como Magnus Liber.
A pesar de ser un clérigo escribió mucha música de carácter profano (Virelais, Baladas, etc.) aunque su obra más conocida es una misa para 4 voces: la Messe de Nostre-Dame. Se cree que la compuso para la coronación de Carlos V de Francia y que sonó por primera vez en la catedral gótica de Reims. Es tan conocida, porque además de ser muy hermosa era la primera vez que un compositor hacía él solo todas las partes de una Misa. El artista empieza a ser consciente de su valor: sin duda nos acercamos al Renacimiento.
A pesar de que ha perdido muchas de las obras que tenía originalmente, conserva 10 cánticos y danzas que realizaban los peregrinos que allí acudían.
Esa será OTRA HISTORIA...
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